willo
Forero Experto
Sufre un accidente al estrenar su Mazda MX-5 y el concesionario le regala uno nuevo
El propietario de esta historia tuvo tan mala suerte que casi inmediatamente después de sacar su nuevo y flamante Mazda MX-5 del concesionario sufrió un accidente que dejó al deportivo muy mal parado. Por sorpresa el concesionario ha decidido ahorrarle muchos disgustos al cliente regalándole una nueva unidad.
Por suerte ambos ocupantes del vehículo solo sufrieron heridas leves pero el susto y la angustia de accidentar su vehículo recién sacado del concesionario fue inevitable. El deportivo quedó seriamente destrozado, más de lo que se aprecia en las imágenes, ya que el impacto hizo que chocase también con el vehículo que le precedía y el chasis monocasco quedó desplazado.
Al propietario le quedaba por delante un gran número de horas tratando de hacer que la aseguradora le repare la unidad además de asimilar que ya no tendrá un vehículo nuevo sino uno "reparado en profundidad".
Por fortuna el concesionario contactó con el cliente un par de días después para comunicarle que ellos se encargarían de darle una unidad completamente nueva asimilando de forma altruista todas las responsabilidades sobre el vehículo siniestrado ya que ellos realmente no tienen obligación ninguna. No cabe decir nada más que un fuerte aplauso por la respuesta del concesionario Mazda ante tal angustiosa situación.
Pronto hacen eso en España
.
El propietario de esta historia tuvo tan mala suerte que casi inmediatamente después de sacar su nuevo y flamante Mazda MX-5 del concesionario sufrió un accidente que dejó al deportivo muy mal parado. Por sorpresa el concesionario ha decidido ahorrarle muchos disgustos al cliente regalándole una nueva unidad.
Por suerte ambos ocupantes del vehículo solo sufrieron heridas leves pero el susto y la angustia de accidentar su vehículo recién sacado del concesionario fue inevitable. El deportivo quedó seriamente destrozado, más de lo que se aprecia en las imágenes, ya que el impacto hizo que chocase también con el vehículo que le precedía y el chasis monocasco quedó desplazado.
Al propietario le quedaba por delante un gran número de horas tratando de hacer que la aseguradora le repare la unidad además de asimilar que ya no tendrá un vehículo nuevo sino uno "reparado en profundidad".
Por fortuna el concesionario contactó con el cliente un par de días después para comunicarle que ellos se encargarían de darle una unidad completamente nueva asimilando de forma altruista todas las responsabilidades sobre el vehículo siniestrado ya que ellos realmente no tienen obligación ninguna. No cabe decir nada más que un fuerte aplauso por la respuesta del concesionario Mazda ante tal angustiosa situación.
Pronto hacen eso en España
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