Francisco SC
Forero Experto
Hola,
Una pijada que le he encontrado al control de velocidad. Os aviso de que si uno no viaja normalmente por carreteras con variaciones bruscas de pendiente arriba/abajo y limitadas a 60/80, no se lo va a encontrar.
Al ir el coche empujando cuesta arriba con el control de velocidad, y de repente cambiar la cuesta arriba por cuesta abajo bruscamente, al control de velocidad le cuesta unos segundos ajustar la potencia a las nuevas condiciones. Debido a eso, el coche -que pesa un rato- tiende a embalarse; no es infrecuente en las cuestas de Mos cerca de Vigo ir con el control a 80, y encontrarse al cambiar la pendiente que el coche ha llegado a 95. Transcurridos unos segundos, el control de velocidad reacciona, e incluso reduce una marcha o dos para reducir la velocidad (cosa que me gusta, en el Alfa el control de velocidad no reduce automáticamente).
El hecho es que en esas condiciones, uno puede encarar una cuesta abajo (con su radar bien escondido) a 90-95 en lugar de a 80. ¿Y cual es la reacción del conductor? Pues darle unos toques al control de velocidad para decelerar un poco. Eso me funciona perfectamente en mi Alfa (que además no se embala tanto por su poco peso). ¿Y qué efecto tiene en el CX-5? ¡¡Pues justo el contrario del que se pretende!! ¡¡El coche acelera!!
Me explico: uno va con el control a 80. El peso del coche y la lentitud de reacción del control de velocidad lo ponen a 10 km/h más al encarar la cuesta abajo. Uno en ese momento presiona el "-" creyendo que el coche va a aminorar... pero el "-" en este coche ajusta el control a la velocidad a la que en ese momento va el coche, que son 90. Y debido a que el control no se ha estabilizado aún en las nuevas condiciones, el coche se embala rápidamente hasta alcanzar los 100 km/h.
No he notado eso circulando por autopista a 120, debido seguramente a que a esa velocidad la resistencia aerodinámica es ya suficiente para frenar el coche y evitar ese embalamiento inicial.
Y el el alfa, el problema es inexistente no sólo por el menor peso, sino por la filosofía: el "+" sirve para preseleccionar la velocidad y para aumentar; mientras que el "-" sólo sirve para disminuir, no para preseleccionar como en el CX-5.
Un día convenzo a mi mujer para que grabe la escena: yo apretando el "-" desesperadamente, y el coche cada vez más deprisa.
...Pero será en otra carretera con menos radares, que si no, me crujen. Mientras tanto, ya he aprendido que en las cuestas de Mos, mejor pisar el freno (con lo que se deja de disfrutar del control de velocidad.
Una pijada que le he encontrado al control de velocidad. Os aviso de que si uno no viaja normalmente por carreteras con variaciones bruscas de pendiente arriba/abajo y limitadas a 60/80, no se lo va a encontrar.
Al ir el coche empujando cuesta arriba con el control de velocidad, y de repente cambiar la cuesta arriba por cuesta abajo bruscamente, al control de velocidad le cuesta unos segundos ajustar la potencia a las nuevas condiciones. Debido a eso, el coche -que pesa un rato- tiende a embalarse; no es infrecuente en las cuestas de Mos cerca de Vigo ir con el control a 80, y encontrarse al cambiar la pendiente que el coche ha llegado a 95. Transcurridos unos segundos, el control de velocidad reacciona, e incluso reduce una marcha o dos para reducir la velocidad (cosa que me gusta, en el Alfa el control de velocidad no reduce automáticamente).
El hecho es que en esas condiciones, uno puede encarar una cuesta abajo (con su radar bien escondido) a 90-95 en lugar de a 80. ¿Y cual es la reacción del conductor? Pues darle unos toques al control de velocidad para decelerar un poco. Eso me funciona perfectamente en mi Alfa (que además no se embala tanto por su poco peso). ¿Y qué efecto tiene en el CX-5? ¡¡Pues justo el contrario del que se pretende!! ¡¡El coche acelera!!
Me explico: uno va con el control a 80. El peso del coche y la lentitud de reacción del control de velocidad lo ponen a 10 km/h más al encarar la cuesta abajo. Uno en ese momento presiona el "-" creyendo que el coche va a aminorar... pero el "-" en este coche ajusta el control a la velocidad a la que en ese momento va el coche, que son 90. Y debido a que el control no se ha estabilizado aún en las nuevas condiciones, el coche se embala rápidamente hasta alcanzar los 100 km/h.
No he notado eso circulando por autopista a 120, debido seguramente a que a esa velocidad la resistencia aerodinámica es ya suficiente para frenar el coche y evitar ese embalamiento inicial.
Y el el alfa, el problema es inexistente no sólo por el menor peso, sino por la filosofía: el "+" sirve para preseleccionar la velocidad y para aumentar; mientras que el "-" sólo sirve para disminuir, no para preseleccionar como en el CX-5.
Un día convenzo a mi mujer para que grabe la escena: yo apretando el "-" desesperadamente, y el coche cada vez más deprisa.
