Bueno, esta mañana he tenido que ir a un taller (no del coche, sino de equilibrado de hélices, por trabajo). arranco el coche, desplazamiento de 10 minutos... pillo un semáforo, entra el i-stop, todo OK... paro en la puerta del taller, polígono industrial todo a oscuras -la crisis-; dejo el coche en mal sitio muy a mi pesar, con las luces de alerta encendidas (por aquello de que no me fuese a hacer una caricia un camión en la oscuridad del polígono). Tardo unos 15 nimutos, arranco el coche, todo normal... paro en el primer semáforo y entra el i-stop. Al cabo de un segundo, arranca de nuevo el motor y aparece un mensaje, en ámbar: "Inspección necesaria del sistema de gestión de la batería", y el indicador de i-stop en ámbar e intermitente.
He llegado a la oficina, pensando en llamar a la empresa de renting. He apagado el coche, y lo he vuelto a encender. Todo OK. Ningún mensaje. He enchufado el OBD, me dice que no hay ningún mensaje de error almacenado
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No sé qué hacer. Si llamo a la empresa de renting, me ponen un coche de sustitución al momento, pero no me apetece quedarme ahora 115 días sin mi CX-5... entre los días de fiesta, la ignorancia del taller, las consultas a Mazda, la bola de cristal del jefe de taller que tendrá el software incompatible con el CX-5, el que me digan que la culpa es mía por no saber conducir este coche.... miedo me da.
Tal vez haya sido sólo que la batería al llevar pocos km no había recuperado aún la carga... o tal vez sea el síndrome de la batería chunga...
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, o como el otro francés, que son agentes de la competencia para desprestigiar a la marca. No se en qué cabeza sana caben tamañas teorías, pero desde luego deja al pie de los caballos a los conces y a la marca.
Ese se queda sin batería, y le compro otra y se la monto yo sin necesidad de acudir al exorcista.
