Hace una semana llevé el coche a la tercera revisión, y después de verificar con el personal del taller que era solo una mejora sin importancia, y no asociada a averías o asuntos de garantías, me negué a realizarla. Esto iba en línea con el texto de la carta que indica claramente que el objeto es “mejorar el placer de conducción”. Mi placer de conducción es tan estupendo que no considero necesario mejorarlo.
Me dijeron que era el primer caso que se negaba a hacerla, y que tenían que avisar al Delegado de Mazda para que quitara la campaña de mi expediente para que no volvieran a pedirmela en ningún taller.
Cuando fui a recoger el coche me presentaron un papel para firmar en el que declaraba que me negaba a realizarla. Mi sorpresa fue al ver el título que indicaba “Avería/Emisiones”. Me dijeron que era un formato estándar y que no había otro, que la central se lo había solicitado.
Seguí leyendo y había un párrafo que decía que firmando esto declaraba que me hacía responsable al llevarme el coche averiado y que exoneraba a Mazda y al taller de cualquier problema relacionado con la seguridad del tráfico y de los ocupantes derivado de negarme a arreglar la avería. Menuda sorpresa.
Dado que es un problema originado por la marca y no del taller, y que siempre llevo el coche allí porque el trato es impecable, la solución de compromiso fue tachar y modificar el texto para poder darles algo firmado que justificara que ellos han seguido las instrucciones de Mazda (lo cual es cierto) y que la campaña desaparezca de mi ficha para que no me la hagan.
Por último, aunque no puedo verificarlo, parece más que evidente que están cargando el software del modelo 2017, que debe venir algo más capado de par en bajo/medio régimen que el de 2015, para curarse en salud por si algún día sale algún estudio como el de Volskwagen o por algún problema de avería del motor. Viendo la ficha técnica de ambos se ve como empeora un segundo aprox en el 0 a 100, a pesar de ser casi iguales en peso. No creo que varíe casi la potencia máxima, pero si la potencia a bajo/medio régimen (par motor x revoluciones), que no figura en la ficha, y que solo se puede verificar contrastando ambas curvas en un banco de potencia. De esta forma ya tendrían el problema solucionado y no tendrían que indemnizar o pagar multas, sin variar aparentemente el producto. Si no no se entiende la falta de transparecia de la marca.
La otra opción que barajaba era llevar el coche a un banco certificado, hacer la campaña, volver a llevarlo al mismo rodillo y luego denunciar por estafa. Pero tendría que gastarme mucho dinero además de reprogramarlo para dejarlo en condiciones. No me merece la pena.
La ITV no mide estos parámetros (NOx), y el coche esta cuidado y de origen, por lo que no hay que preocuparse.
Perdón por el tocho, pero me indigna mucho que intenten estafarme. Espero que os sirva de ayuda para decidir lo que sea.